Localización:
Al sur de la provincia de Pontevedra, en la frontera con Portugal por la costa, se encuentra la localidad de La Guardia (A Guarda), un pintoresco pueblo pesquero con mucho encanto y mucha magia.
Y en su ayuntamiento se ubica el monte de Santa Tecla (Santa Tegra), famoso por el castro celta que se asienta en una de sus laderas sobre el infinito océano Atlántico.
Calificación:
Descripción:
El monte es impresionante, tanto por su orogafría, naturaleza e increíbles vistas sobre el mar infinito, como por las construcciones de piedra (cruces y otras edificaciones de piedra) que lo pueblan y trasladan al visitante a otro mundo.
La zona del castro se trata del mayor asentamiento de este tipo de construcción celta existente en Europa. Restos de las antiguas casas en las que habitaban los antiguos pobladores celtas de Galicia. Un lugar lleno de magia, energía e historia.
El monte cuenta con 2 cimas, siendo ambas impresionantes: las vistas sobre el océano Atlántico (las puestas de sol y la costa rompiendo olas), la frontera con Portugal y todas las casitas del pueblo de La Guardia abajo son visiones muy recomendables.
Imágenes:
-Pasear entre los castros celtas y notar el intenso nivel vibratorio del entorno. Posible percepción de vibraciones y entidades pasadas. Recomendable el uso de un péndulo (radiestesia) para medir las vibraciones si se desea.
-Subir a la cima del monte y asomarse a la inmensidad del mar. Realizar peticiones al Universo (practicar la "ley de la atracción").
-En la cima del monte exponerse al soplido del viento y visualizar cómo éste se lleva todo lo malo (todos nuestros pesos y preocupaciones) trayendo lo bueno y lo nuevo a nuestras vidas. Sensación de ligereza, soltar pesos, remordimientos y preocupaciones. Desbloqueo de emociones. Sanación natural.
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